Tabla de contenidos
La salud mediante la dieta según los conceptos de la Medicina Tradicional China
La dietética china y la dietética occidental son eslabones básicos de la salud en sus respectivas culturas. Desde el inicio de la medicina se entendió que la alimentación, más allá de un simple placer, también era un pilar básico, tanto para el mantenimiento de la salud, como coadyudante para abordar la enfermedad.
La dietética occidental actual se basa especialmente en un concepto cuantitativo, en el cual se tiene en cuenta un estudio de la composición de los nutrientes, con el fin de cubrir todas las necesidades. Bajo este prisma la dietética se aplica con el fin de cumplir con los requerimientos de los macronutrientes y micronutrientes. Sin embargo en la dietética china el concepto fundamental es cualitativo, es decir lo importante es la calidad y cualidad de cada uno de los alimentos y su relación con respecto al clima y al estado del individuo (síndrome).
La cultura china atribuye a los alimentos dos cualidades fundamentales, el sabor, la temperatura y una tercera cualidad como es el color de los alimentos.
“No comas solo por placer, aunque puedas encontrarlo. Come para fortalecerte. Come para conservar la vida que el cielo te ha concedido” Confucio
Sabor de los alimentos

El sabor de los alimentos es un concepto que entronca con el concepto filosófico Wu Xing o Ley de los Cinco Movimientos. En dicha ley se entiende que existen cinco grandes patrones o movimientos, los cuales interactúan entre sí, y que se muestran más activos según la estación y clima del año.
Cuando vemos las tablas de clasificación de los alimentos por sabores muchas veces nos sorprendemos puesto que algunos casos no es muy evidente el sabor asignado. Esto se debe a dos circunstancias
- Muchos alimentos van perdiendo un sabor determinado porque mediante selección natural se ha ido desechando aquellos que aportaban un sabor claro al paladar. Por ejemplo el pepino, su sabor natural es el es amargo, pero actualmente es extraño identificar dicho sabor salvo contados casos. Aún cuando ya no identifiquemos ya dicho sabor, la naturaleza energética del pepino sigue siendo de alimento amargo
- Algunos alimentos se les asigna un sabor en función de su efecto en nuestro organismo
Sabor ácido o agrio
Este sabor se relaciona con el movimiento Madera y es el alimento característico de la primavera. En cantidades moderadas es beneficioso para el Hígado y la Vesícula Biliar.
Tiene efecto astringente, antidiaforético (reduce la sudoración), de contención y minimiza el daño que provoca el Viento (clima característico de la primavera).
Incluye muchas frutas como fresas, melocotones, ciruelas, uvas, granadas, también yogur, quesos ácidos, pimientos, etc.
Sabor amargo
El sabor amargo se relaciona con el movimiento Fuego y es el alimento característico del verano. En cantidades moderadas es beneficioso para el Corazón y el Intestino Delgado.
Ayuda a elimina el Calor (clima característico del verano) y elimina la Humedad.
Incluye espárragos, col, apio, té, café, etc
Sabor dulce
El sabor dulce se relaciona con el movimiento Tierra y es el alimento característico del final del verano y de los cambios entre las estaciones. En cantidades moderadas es beneficioso para el Bazo y el Estómago.
Tonifica la energía y la sangre en nuestro organismo, favorece la generación de los líquidos orgánicos de nuestro cuerpo, relaja nuestros músculos y ayuda a eliminar la Humedad (clima característico del periodo final del verano).
Incluye a la mayoría de las frutas, cebollas, zanahoria, calabaza, castañas, carnes, patatas, boniatos, etc.
Sabor picante
El picante se relaciona con el movimiento Metal y es el alimento característico del otoño. En pequeñas cantidades favorece al Pulmón y al Intestino Grueso.
Favorece a la circulación de sangre y de energía, calienta y estimula la sudoración y la llegada de líquidos a la piel, lo que evita la sequedad (clima característico del otoño).
Incluye especias como pimienta, mostaza, orégano, jengibre, ajo, puerros, etc
Sabor salado
Se corresponde con el sabor del movimiento Agua y es el alimento característico del invierno. En cantidades moderadas es beneficioso para el Riñón y la Vejiga de la orina.
Refresca la sangre, estimula los intestinos, favorece la eliminación de masas duras y acúmulos, puede detener el exceso de diuresis que se da con el frío (clima característico del invierno).
Incluye frutos del mar como los pescados, cangrejo, pulpo, algas, también jamón curado, coles de bruselas, salsa de soja, etc.
Si quieres recibir sesiones con un experto en acupuntura y medicina tradicional china, ponte en contacto conmigo

Naturaleza de los alimentos
La naturaleza de los alimentos se refiere por una parte tanto la temperatura en la cual se encuentran los alimentos cuando los ingerimos (una sopa caliente o una ensalada fresca cuyas verduras acaban de salir de la nevera), por otra parte a su propia naturaleza térmica.
Todos entendemos el efecto térmico de los alimentos. Esto hace que el gazpacho de verduras no sea el alimento que pidamos en un frío invierno, ni un guisado caliente de garbanzos con carne y embutidos sea nuestro plato de elección en un chiringuito de playa a unos sofocantes 34º centígrados.
El tipo de cocción al que sometemos a los alimentos también interviene en la naturaleza de la temperatura de los alimentos. Independiente de la temperatura a la cual nos llevemos a la boca el alimento, todos aquellos que hayan sido cocinados con temperaturas elevadas y largo tiempo de cocción como en los asados, aportarán más calor que aquellos con tiempos cortos y temperaturas bajas como en la cocina al vapor.
Los alimentos al ser ingeridos tienen un efecto térmico sobre nuestro organismo. Unos alimentos calientan en mayor o menor grado, otros refrescan o incluso enfrían.
Alimentos de naturaleza caliente
Son alimentos con un efecto de calentamiento más drástico: muchas especias como la pimienta, alimentos grasos, alcohol, etc
Alimentos de naturaleza templada
Estos alimentos aportan calor de una manera más moderada que los calientes: pollo, albaricoque, puerro, etc.
Alimentos de naturaleza fresca
Los alimentos frescos tienen un efecto refrescante más moderado que los alimentos fríos: trigo, conejo, pera, etc.
Alimentos de naturaleza fría
Dichos alimentos aportan un efecto refrescante drástico y rápido: frutos del mar como el cangrejo, pulpo, las algas, etc.
Alimentos de naturaleza neutra
Los alimentos neutros aportan una naturaleza de temperatura equilibrada: arroz, maíz, cerdo, patata, etc.
Color de los alimentos
Esta última categorización se basa en el color de los alimentos.
- Los alimentos verdes dirigen su efecto al Hígado y a la Vesícula Biliar. Tonifican la sangre y tienen efecto depurativo: espinacas, alfalfa, lechuga…
- Los alimentos rojos dirigen su efecto all Corazón y al Intestino Delgado. Favorecen la circulación de la sangre, fortalecen, revitalizan y son tónicos: sandía, pimiento rojo, rábano…
- Los alimentos amarillos (marrones y naranjas) dirigen su efecto al Bazo y al Estómago. Equilibran y regulan: zanahoria, calabaza, maíz, mijo, garbanzos…
- Los alimentos blancos dirigen su efecto al Pulmón y al Intestino Grueso. Tienen efecto purificante: cebolla, nabo, coliflor, arroz, avena
- Los alimentos negros dirigen su efecto al Riñón y a la Vejiga. Refrescan, astringen y nutren la energía esencial: sésamo negro, algas, dátiles, ciruelas…
El secreto de la dietética china para preservar la salud

Tomar té templado antes y durante la comida. Los alimentos deben ser procesados especialmente por el trabajo del Estómago con el apoyo del Bazo. Por este motivo los preceptos dietéticos chinos se centran en primer término en fortalecer a estos órganos. De nada sirve alimentarnos bien si aquellos órganos que deben procesar los alimentos no pueden llevar a cabo correctamente su función. Puesto que el Estómago es como una olla que necesita una temperatura para poder funcionar, los chinos comienzan a tomar antes y durante las comidas té templado que ayude a su correcto funcionamiento, huyendo de bebidas o alimentos de temperatura fría.
Comer tranquilo sin distracciones. La comida debe ser un acto consciente en el que se debe tragar los alimentos sólidos como si fuesen líquidos y los líquidos ingerirlos como sólidos. Es decir, se debe realizar una correcta masticación que facilite el trabajo al Estómago.
Comer de los cinco sabores y equilibrar la naturaleza de los alimentos. La dietética china recomienda ingerir los cinco sabores en cada comida o al menos en el discurso de un día. Si se toman alimentos fríos compensarlos con alimentos de naturaleza caliente, etc.
Tomar alimentos de la estación y de proximidad. Los alimentos de cada estación suelen tener un sabor y una naturaleza que compensa las energías climáticas. Por ejemplo en el verano se dan alimentos de naturaleza fresca y sabor amargo que equilibran al calor estacional y la hiperfunción energética del Corazón y del Intestino Delgado. El problema es que actualmente las cosechas se han multiplicado y no es extraño acceder a alimentos fuera de su temporada.
Mi experiencia con la dietética china
O mejor debería decir mi primera “inexperiencia” con la dietética. Siendo siempre de “buen llantar”, he tenido una tendencia clara a engordar. Esto hizo que de joven probara algunas dietas equilibradas para mi edad, sexo y peso, las cuales me funcionaban respecto a la báscula. Eran dietas que se basaban en un aumento de ingesta de fruta, ensaladas frescas y verduras junto con otros alimentos. Era una dieta que me funcionaba rápido, perdía peso. El problema es cuando al continuar con la dieta me encontraba más cansado, y que llegado a épocas frías como el invierno, el frío me atenazaba, mis manos y mis pies no reaccionaban.
Mi dieta me aportaba todos los nutrientes, vitaminas, minerales, proteínas, hidratos de carbono y grasas sanas, pero siendo joven y practicante de deporte me había convertido en una persona friolera y cansada. Mis heces pasaron a ser blandas (signo de falta de Yang en el sistema digestivo) y en ocasiones con presencia de alimentos sin digerir. Pese a que mi dieta era equilibrada bajo el concepto occidental, la calidad de los alimentos no estaba equilibrada frente a mi constitución y a la estación climática anual.
El exceso de frutas y verduras frescas de naturaleza fría estaban debilitando mi Yang, mi metabolismo estaba siendo dañado. afectando a la función digestiva. Mi dieta me estaba perjudicando, pese a creer en un principio que era justamente lo que mi cuerpo necesitaba.
Entender los preceptos de la dietética china fue transformador y dio explicación a muchas personas que acudían a mis sesiones de acupuntura, las cuales pese a tomar alimentos muy poco calóricos, acaban sin obtener resultados por una alimentación cualitativamente inadecuada.
Muy interesante este artículo, como todo lo que escribe y divulga este magnífico profesor.
Muchas gracias Lola por tus amables palabras. Me alegra que te parezca interesante
Estupendo artículo, cómo puedo encontrar un experto en dietética china en Madrid?